TRABAJO, CONSTANCIA Y DIÁLOGO  CRUZ CATALINA. PEDRAJAS.-

Como si con él no fuera la cosa y sin hacer ningún cambio de planes en su agenda laboral y social de ayer, Cecilia Vadillo Arroyo aguarda paciente y sin querer hacer ningún tipo de comentario al respecto sobre el cargo que estrenará y los problemas que se va a encontrar cuando el delegado del gobierno en Castilla y León, Miguel Alejo, haga efectivo su nombramiento como subdelegado.

Como cualquier otro día acudió por la mañana a impartir clases al Instituto Pío del Río Hortega de Portillo, del que es profesor, por la tarde al centro asociado de la UNED de Medina delCampo, del que también es docente, para finalizar por la noche en Pedrajas de San Esteban en una reunión con los concejales del grupo socialista en el consistorio de la villa piñonera, del que es el portavoz, en el transcurso de la cual informó de la inminente presentación de su renuncia al acta de concejal, al no ser compatibles ambos cargos.

Cecilio Vadillo, que se quedó a las puertas de ocupar el sillón de la Alcaldía de Pedrajas de San Esteban el pasado año y hace poco menos de dos meses de un escaño en el Congreso de los Diputados por apenas un puñado de votos, ve recompensado con este nombramiento su trabajo, constancia y dedicación en la ejecutiva provincial del PSOE, en la que se ocupaba de los temas educativos. Vadillo inició su carrera política encabezando la lista socialista al Ayuntamiento de Pedrajas de San Esteban en el año 1995 y más tarde fue designado diputado provincial por la junta de zona de Valladolid.

Nacido en 1958 en la ciudad gala de Burdeos, aunque se siente abulense «del valle del Tiétar para mas señas» y castellano leonés por los cuatro costados reside desde hace tres lustros de forma habitual en la villa piñonera de Pedrajas de San Esteban, donde recaló al ser designada su esposa al entonces Instituto de Formación Profesional de Íscar.

Padre de dos hijas, de 19 y 7 años, es amante de la lectura, poesía, el cine y el deporte en general. Su nombre para el cargo de subdelegado del gobierno en Valladolid saltó a la palestra entre la propia familia socialista por su condición de hombre dialogante, sencillo y cercano.

La de ayer será sin duda para Cecilio Vadillo Arroyo (Burdeos, 1958) una de esas jornadas inolvidables tras su toma de posesión como subdelegado del gobierno en Valladolid, de momento en comisión de servicio. Vadillo, un hombre sencillo, cercano y dialogante, deja atrás casi nueve años como líder de la oposición en el Ayuntamiento de Pedrajas de San Esteban, localidad en la que reside y que podría abandonar por motivos de seguridad.

-¿Qué supone para usted este nombramiento?

-Indudablemente un orgullo y una satisfacción personal por lo que tiene el puesto de compromiso y responsabilidad hacia los ciudadanos, porque no hay que olvidar que aunque este sea un cargo de confianza entre las personas del partido, el destinatario son todos los ciudadanos.

-¿Va a cambiar algo en la Subdelegación del Gobierno?

-No se trata de hacer cambios traumáticos. Empieza un nuevo periodo y como tal conllevará ciertos cambios que pasan por hacer las cosas de forma que el ciudadano no vea a la administración como algo distante.

-¿Cuáles son sus cometidos más inmediatos?

-Lo que ya es un hecho, la preparación de la próxima convocatoria electoral al parlamento europeo. Aunque la maquinaria ya estaba en marcha, es algo que por ahora se me presta complicado y me asusta un poco.

-Sobre la mesa de su despacho colean tres importantes temas heredados de su antecesor: el trafico de drogas en Pajarillos, el soterramiento y el desvío del tren de mercancías y el trazado de la autovía del Duero. ¿Qué tratamiento piensa darles?

-Sí, son tres temas importantes en los que tendrá que imponerse la fuerza de la razón mediante el diálogo y el acercamiento de posturas entre todas las partes. En el tema de Pajarillos, aunque he abordado el tema con el anterior subdelegado, estoy pendiente de recoger toda la información para conocer a fondo la problemática y luego realizar una toma de contacto con las partes. En relación a los otros dos temas, por la importancia que tienen de cara al desarrollo económico y social de la provincia, lo primero es conocer todo lo que hay a día de hoy. Aunque desde el partido ha habido algún tipo de posicionamiento al respecto y quien tiene la última palabra es el ministerio, no faltará un acercamiento de posturas y diálogo con todas las partes .

-¿Cómo piensa conciliar los condicionantes de Valladolid como capital de la comunidad?

-Como he reiterado, con diálogo, acercamiento a cada una de las posturas y haciendo las cosas de una forma razonable, nunca de manera arbitraria.

-¿Un gobierno local y provincial del PP dificultará el entendimiento con el Ejecutivo central?

-No tiene porqué. Que haya disparidad de criterios no implica que no tenga que haber entendimiento y este se logra por la vía del diálogo, no por la fuerza.